El paro: de feo a esperanzador...

Este martes 30, para ser el último de junio, qué fregado: un paro de trasnporte me sacó disparada de la cama para preparar mi almuerzo y mi desayuno, alistarme y salir, y salir con 20 minutos de anticipación, es decir, antes de mi hora habitual.

Llegué al paradero y la montonera iba en aumento a cada minuto, lo que me obligó a ir en taxi, cómodo sí, pero no para mi bolsillo; de ida a mi otro trabajo fui más guerrerra y decidí irme en micro, combi o lo que fuera masivo, menos taxi... llegó luego de no sé cuánto la combi que me llevaría a 3/4 de mi camino, el resto lo terminé haciendo en un microbús; conté, afortunadamente, en mi trayecto con caballeros que me cedieron el asiento y eso alivio me pesado viaje grandemente.

Llegué al cole, almorcé, y solo asistieron 3 de mis 4 aulas... yeeeeeeeeee... jugué voley, dormí una hora; salí y pedí por un transporte masivo piadoso para el corto camino: llegó una combi que me llevó a mi seguro puerto oportunamente; dado que salí temprano tuve tiempo de compartir tiempo con mi madre y luego mirar la cartelera para ver una peli. La encontré y hallé también la grata compañía de uno de mis mejores amigos de toda la vida: Edgar.

Fui al gimnasio, hice mi clase favorita y luego a las duchas. Regresé a mi casa y me fue a recoger. Llegamos al cine, pedimos canchita y chicha; y a ver la película: UP, una preciosa película de dibujitos animados, en realidad conmovedora y muy tierna.

Up es una película que transmite esperanza, solidaridad, comprensión y el más tierno, eterno y puro amor... por la vida... la importancia de cumplir con la palabra empeñada, el valor de las promesas hechas... y el amor, la amistad en todos sus manifiestos. En verdad: hermosa.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Los paros, las crisis, sinónimos de oportunidad para algo nuevo.

A mí me encantó este martes, me gustaría que hayan acontecimientos similares.

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